Noriko Takaya se propuso seguir los pasos de su padre, desea convertirse en piloto en pos de viajar al espacio y buscar a su desaparecido progenitor. sin embargo esta meta se ve lejana, Noriko es de las pilotos más atrasadas de su escuela, es incapaz de hacer movimiento alguno en su RX-7 (un robot especializado para el combate). Para bien de la protagonista todo cambia cuando llega Koichiro Ota su escuela, él tiene la misión de elegir a las dos estudiantes más talentosas para reclutarlas como posibles conductoras del Gunbuster. Elige a Kazumi Amano, la chica prodigio de la escuela, y a Noriko, para sorpresa de todos. El hecho resulta polémico, Noriko se vuelve víctima del acoso de sus compañeras, quienes asumen que la elección del Coach se debió al nepotismo, pues otrora Koichiro fue compañero del padre de Noriko e incluso le salvó la vida. La protagonista no puede más que lamentarse ante Koichiro, ella piensa que no se merecía ser reclutada, por otra parte el acoso escolar cada vez es más severo, sin embargo este le hace ver que ella se subestima, tras un arduo entrenamiento domina su Rx-7 y viaja al espacio con la cabeza en alto. Una vez en el espacio, ambas compañeras tripulan el Exelion, una base militar que supervisa a una especie alienígena que se alimenta de estrellas y planetas. La trama se enfocará en las múltiples batallas, junto a los dilemas emocionales y tensiones que involucran una guerra en la que se juega todo el destino de la humanidad.
La obra se divide en tres partes, cada una con un clímax narrativo distinto que marca la evolución de los personajes. La primera parte tan sólo abarca el primer episodio, centrado en la historia de superación de Noriko. Aunque el conflicto es el mismo que el episodios posteriores, el tono, el género y algunos otros rasgos de este episodio no se verán más adelante. Esta primera Ova inicia como una parodia a los tópicos escolares del anime, donde las colegialas son suplantadas por robots gigantes, lo que genera muchas situaciones cómicas por su rareza. La segunda parte del episodio se presenta como un spokon, donde las secuencias de entrenamiento y el espíritu de superación son protagonizadas nuevamente por un robot gigante. Ya la tercera parte del episodio es más seria, pues se enfoca en el combate, y los tópicos anime no son ya un objeto cómico.
La siguiente parte de la historia se componen de los episodios dos, tres y cuatro, que forman una clase de trilogía en donde se observa el desarrollo más intenso de la protagonista, ya con muy pocos alivios cómicos y nulos saltos de género. La segunda Ova siembra las inseguridades en la protagonista, es asignada para investigar un misterioso objeto que se aproxima a la tierra, descubre que es la nave donde viajaba su padre, destruida y sin ningún rastro de vida, Noriko se da cuenta que su padre ha muerto, por primera vez se entera de la gravedad que implica su labor. En la tercera Ova Kazumi se niega a ser la compañera de Noriko, ella también estuvo en la misión anterior y sabe que Noriko no está lista para afrontar situaciones de peligro real. Smith Toren, un muchacho que recién conoció pero con quien forjó una amistad, al verla cabizbaja se ofrece a ser su compañero, en la batalla Noriko entra en pánico y se paraliza, al poco tiempo descubre que Smith desapareció en el vacío del espacio y ella no lo ayudó por miedo. En la cuarta Ova, Noriko se siente culpable de la muerte de Smith y desea deshacer sus miedos, para ello le pide a Koichiro que le de un entrenamiento intensivo. Jung Freud se entera de esto, nota que el entrenamiento en realidad está enfocado en el manejo del Gunbuster, envidiosa reta a su compañera a una batalla, sin embargo en cuanto Noriko sale del espacio tiene un ataque de pánico y queda inconsciente. Al despertar escucha a Kazumi y Jung hablando, ambas asumen que Noriko no podrá luchar en el espacio y es muy probable que morirá cuando lo intente. Sin previo aviso una gran cantidad de enemigos intercepta al Exelion, se ven obligados a luchar en una batalla suicida antes que el enemigo descubra la ruta a la tierra. Tras las múltiples quejas de Kazumi, Koichiro impide que Noriko se una a la batalla, esta se queda sola en el dormitorio, llorando por su incapacidad y la muerte de Smith. Pero tras reflexionar sobre su condición, se da cuenta que vive en un círculo vicioso de autocompasión, decide pilotar el Gunbuster y se une a la lucha cuando las esperanzas de todos parecen perdidas ante la superioridad del enemigo.
El desarrollo de Noriko se completa en esta segunda parte, y las dos ovas restantes cambian de protagonista. Las dos ovas siguientes crean un nuevo conflicto en los personajes, esta vez Kazumi es el nuevo personaje principal. El breve lapso en el Exilion, significó toda una década en la tierra, las protagonistas a su regreso ven un mundo que creció sin ellas. Noriko se encuentra con su mejor amiga, quien ya es madre e incluso tiene una hija. El enemigo descubrió la ubicación de la tierra y se aproximan con una flota gigantesca. La tierra tiene que recurrir a medidas desesperadas, el plan es lanzar una bomba capaz de crear un hoyo negro en el espacio que absorba a todos los invasores. Kazumi y Noriko quedan a cargo de la misión, sin embargo Kazumi no desea participar, pues Koichiro tiene una enfermedad terminal y ella sabe que cuando regrese al planeta ya habrá pasado mucho tiempo y él ya no vivirá. Durante la batalla Kazumi deja de luchar, sabe que aún ganand ella jamás podrá revelarle sus sentimientos a Koichiro, sin embargo Noriko la hace reaccionar, le dice que, aunque ellas no puedan tener la vida que quieren, su sacrificio es capaz de darle al resto de la humanidad un buen destino, Koichiro hizo el mismo sacrifico a dedicar sus últimos días para diseñar ese plan, entonces ambas compañeras se unen a la lucha.
La última ova transcurre una década después, se ha decidido eliminar al enemigo por completo, para ello tienen que lanzar la bomba más poderosa que ha creado la humanidad. Kazumi decide participar en la misión, regresa al espacio después de una década. Noriko permaneció en el espacio todo este tiempo, por lo que el encuentro con Kazumi es una sorpresa total, su amiga ahora ya es una adulta. Kazumi le cuenta las noticias de la tierra, Noriko no puede más que llorar al conocer que todos sus conocidos ya envejecieron, mientras ella estuvo lejos y desincronizada del tiempo. La bomba no puede detonar, por lo que Noriko y Kazumi tienen que detonarla desde adentro, sin embargo esto ocasionará que su regreso no sea seguro y, aun si es posible, ellas volverán a una época por completo distinta. No obstante se sacrifican con la esperanza de que la humanidad sobreviva y puedan regresar a un mundo todavía habitado.
La serie significó una agradable sorpresa, tiene muchos aspectos llamativos que incluso cobran más valor con el paso del tiempo. Por ejemplo se trata de un predecesor directo de Neon Genesis Evangelion, Noriko y Shinji viven la desmitificación del concepto del héroe, son personajes frágiles que entran en depresión, cuyos triunfos no son suficientes para llenar su angustia ante la existencia y las pérdidas que implican su aventura. La ambigüedad moral llega en ambas historias, no sólo porque los antagonistas son entes misteriosos, cuyas motivaciones parecen superar la lógica humana; pues sólo se les entiende como un producto del horror cósmico; sino porque, en las medidas de defensa humanas también se oculta un aspecto siniestro, la defensa contra los aliens conlleva destruir buena parte del sistema solar, y posteriormente la galaxia.
Aunque Gunbuster es una experiencia menos densa que Evangelion, en muchos aspectos los tópicos del anime se imponen ante las aparentes transgresiones de la obra. Por ejemplo Noriko supera su depresión, se sube al Gunbuster y los salva a todos en una llamativa secuencia de combate. Evangelion no tiene un momento así, la depresión de Shinji perdura, hay puntos altos y bajos, pero no una ruptura, tampoco un momento épico en que Shinji supera su depresión y se convierte en el héroe. No se debe asumir que a Gunbuster le falta profundidad, una de las cosas más llamativas son los siempre controvertidos viajes en el tiempo, le dan cierta intriga a la trama, no sólo se trata de afrontar riesgos, incluso ganando se pierde, en el espacio el tiempo pasa a otra velocidad, las protagonistas a lo largo de la historia viven de forma constante el choque temporal, cada misión se convierte en una angustia mayor, aún al regresar no saben si volverán a ver a sus seres queridos.
También se debe mencionar en esta breve comparación a Jung Freud, que parece ser la predecesora directa de Asuka Langley, no sólo por ser pelirrojas y rusas, aunque en gran parte sí es por eso, también desempeñan un rol muy similar de chicas prodigio que rivalizan con los protagonistas, además comparten personalidades análogas. Es una relación algo superflua, pero debe considerarse que Jung no tiene un desarrollo tan profundo como el de Asuka, aún así su poco tiempo de exposición basta para que la semejanza no sea del todo desaforada.
En cuanto a los personajes, Noriko es un gran personaje, su desarrollo y motivaciones siempre son claras y bien ejecutadas. Incluso es motivo de destacar las inseguridades en Noriko, que no se dejan de lado en ningún momento, por ejemplo en el primer capítulo su problema radica en su incapacidad para actuar en situaciones de peligro. Además teme descubrir que su padre está muerto, por eso actúa con conformismo, si lo intenta y fracasa no puede culparse de no hacer nada, además evita conocer la verdad. Aunque tiene una subida de seguridad al llegar al espacio, encuentra de nuevo sus inseguridades tras el abandono de Kazumi y la muerte de Smith, Noriko siempre tenía la confianza de que alguien más talentoso la podría ayudar en las peores situaciones. Pese a que entrena para superar su miedo no lo logra y vuelve a lo mismo, lo intentó y fracasó, queda al menos exenta de la culpa, pero rompe el círculo vicioso al volver a intentar, sin importarle ya el fracaso o la victoria.
El resto de personajes, en cambio, no tienen tan buena ejecución. En Kazumi por ejemplo, muchos de sus conflictos y motivaciones se dejan en la elipsis, es imposible de notar un desarrollo palpable. Sus primeras funciones se resumen en negarse a ser compañera de Noriko por su falta de experiencia, a la vez que es una mentora para la protagonista. Su enamoramiento por Koichiro viene un tanto de la nada, y el único indicio de esto son sus quejas hacía él por sobrestimar las capacidades de Noriko, por lo que su figura de mentora se difumina, pues su preocupación ya no se entiende como una forma de cuidar a su compañera, sino como celos. Por otro lado, incluso en la misión donde se desarrolla más es opacado por Noriko, lo que se resalta en esta misión es el avance de Noriko, quien ha madurado y entiende los sacrificios que implican su profesión, siendo capaz de aportar algo a un personaje que durante toda la serie veía como su superior.
Lo mismo ocurre con Koichiro, pero a un grado peor. Los motivos por los que recluta a Noriko son oscuros, él no la conoce previamente a su elección, no hay un momento en que él note una habilidad oculta en Noriko, por lo que reclutarla sí se trata de nepotismo, como afirmaba el resto de personajes. Quizá sí conocía su motivación, pero no queda claro, aunque se puede concluir que el mensaje de la obra es que la motivación correcta supera a cualquier talento, tampoco se puede afirmar del todo sin recurrir a conjeturas. Al final lo único que seguro es que Koichiro eligió a una estudiante con talento por debajo de la media para desempañar un cargo del que dependía toda la humanidad sólo porque conoció a su padre.
Su enamoramiento por Kazumi tampoco es claro, siempre se ve más interesado en Noriko que en ella, sin embargo, aun si estuviera enamorado de Noriko, sufriría de la misma ambigüedad, pues con la protagonista desempeña una relación de mentor y alumna, más que sentimental. De hecho él nunca ayuda en el plano emotivo a Noriko, la entrena y la incita a esforzarse, pero tras la muerte de Smith esto mismo se convierte en una carga, la protagonista, a pesar de esforzarse, no logra superar su terror y se hunde más en su depresión. Aunque debe decirse que él siempre apoya y motiva a Noriko, no obstante a sus múltiples fracasos.
Además, su relación con Kazumi no es del todo sana, hay violencia física, le miente sobre su salud para que participe en la misión, incluso cuando sabe que Kazumi no estaba en condiciones mentales para hacerlo, y lo más amable que le dice a lo largo de la serie es que ella y Noriko deben pilotear el Gunbuster juntas. Resalto estos valores nocivos en su relación a modo de señalar la poca justificación que hay en la unión de ambos personajes, de la apatía se pasa a la simpatía con un nulo desarrollo. En todo caso Koichiro se puede definir como un motivador, que motiva sin importar nada, incluso cuando puede resultar adverso su apoyo.
Y esto es Gunbuster, un gran anime con una historia llamativa y una protagonista interesante con un buen desarrollo. Incluso mejora con el paso de tiempo, gracias a su relación con Evangelion, el uso de horror cósmico o su interesante modo de emplear los viajes espaciales y temporales como algo paralelo; elementos que hoy en día son muy apreciados. Sin embargo sus principales fallas llegan cuando se habla de los personajes secundarios, pese a que muchos de ellos tienen su carisma, su pobre desarrollo se ve opacado por la profundidad de su protagonista. Lo cual se agrava cuando se piensa que Noriko abandona el protagonismo en la cuarta Ova, por lo que la quinta se convierte en una colección de momentos infundados y un dramatismo con el que es difícil conectar al basarse en hecho difusos; mientras que la quinta se trata más de un epílogo que se dedica a cerrar cabos sueltos y dar entrada a una despedida. Por contraste las primeras cuatro Ovas adquieren un mayor mérito, la primera por ser un juego interesante en que se parodian diversos tópicos del anime, las otras tres por ofrecer un interesante desarrollo de personaje que culmina en un clímax emocionante.
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