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Diferencias entre el anime y el manga de Maison Ikkoku

En general el anime de Maison Ikkoku es un buen acercamiento a la obra, sin embargo tiene una serie de cambios respecto a la versión original que modifican de forma relevante el cómo se entienden y desarrollan distintos personajes. Por tal motivo es importante resaltar aquellos desvíos que existen en la adaptación animada, o al menos aquellos que se consideran los más significativos, al ser puntos clave en trama. 



El desempleo y la depresión



Quizá el cambio más relevante para la trama es el cómo Godai queda desempleado y todo lo que vive alrededor de ello. En primer lugar, el conflicto del desempleo tiene un contexto diferente al que se muestra en el anime. En el manga Godai busca trabajo porque está apunto de terminar la universidad, pero al no conseguir que ninguna empresa lo contrate, trabaja en el jardín de niños como una medida desesperada, sólo después de tiempo se da cuenta que ser puericultor es su verdadera vocación y decide estudiar un par de años más para obtener la licencia. En el anime la situación cambia radicalmente, pues su estancia universitaria es extendida al par de años que estudia como puericultor, entonces las motivaciones de Godai resultan ser otras, ahora quiere conseguir trabajo para casarse con Kyoko en cuanto termine la universidad. De hecho mientras en el manga es el único de sus compañeros en no conseguir empleo, en el anime es el primero. Con esto también se modifica la naturaleza del empleo en el jardín de niños, no es un trabajo serio, sino que se trata de un empleo de medio tiempo que compagina junto a sus estudios. 

El chantaje de Yagami a su padre para que acepte a Godai en su empresa es otro cambio a resaltar. En el manga ella regresa a su casa cuando su padre le da a Godai la carta de recomendación de la empresa que posteriormente cae en bancarrota. En el anime se extiende la situación, Yagami vuelve a encerrarse en la Maison Ikkoku hasta que su padre le vuelva a dar una carta de recomendación para la empresa principal. Asunto que crea un error argumental, pues se supone que el padre de Yagami no podía darle la carta pues donde él trabajaba ya no había vacantes, por eso buscó otra empresa asociada. Aunque la diferencia que me interesa resaltar está en las mismas razones por las que Godai rechazó la segunda carta. En el manga, pese a que no existe esta situación, se entiende que a Godai en verdad le gusta trabajar en el kinder, por lo que abandona sus aspiraciones laborales anteriores. En el anime esto no es tan claro para él, niega la carta de recomendación ya que desde su punto de vista aceptarla es como si alguien más decidiera su propio futuro. Por lo que la vocación de Godai es más evidente en el manga, aunque también fue su única opción; mientras en el anime se trató más de un salto de fe y de dar valor a su propia autonomía.  

Dejando a un lado todo esto, la depresión de Godai por estar desempleado es un gran conflicto en el personaje. En el anime nunca tiene esta presión porque aún sigue en la universidad y el futuro no es tan cercano. En cambio en el manga se observa cómo el personaje vive frustrado y deprimido al no conseguir ningún trabajo. Esto también afecta su autoestima y sus sueños, pues se siente incapaz de darle un buen futuro a Kyoko. E incluso los intentos de la protagonista por animarlo surten un efecto contrario, al Godai interpretarlos como muestras de lástima.  

De hecho esto desemboca en uno de los mejores capítulos del manga “Perdidos entre cerezos”, cuando Kyoko intenta animar a Godai, durante su charla le recuerda a Soichiro, a lo que este responde con un seco “yo no soy Soichiro”. Por lo común el manga muestra que cuando Godai más le gustaba a Kyoko es cuando este le recuerda a Soichiro, sin embargo en ese momento implica un punto de quiebre, en el cual Kyoko tiene que querer a Godai por él mismo y el protagonista debe abandonar la idea de ser un reemplazo al difunto esposo de su casera. Después que ambos personajes conversan sobre el asunto, Godai en verdad puede mejorar, salir del bache en el que estaba y esforzarse. Este es el punto donde Godai comienza su proceso de madurez. El anime omite la crudeza de la situación, aunque guarda ciertos atisbos de esto, lo cierto es que el proceso de crecimiento de Yusaku es incluso ambiguo. 

 

La sexualidad



Otra serie de episodios que el manga omite es donde se ve una presencia de temas sexuales. Hay dos que no son adaptados. El primero es “Recuerdos de verano”, donde Kozue al escuchar a sus amigas, quiere hacer algo emocionante con Godai que le haga recordar su verano. Esto Godai lo entiende como una insinuación a tener relaciones sexuales, por lo que pasa es resto del capítulo preguntarse si debería hacerlo y cómo repercutiría en su vida. El otro se titula “¿Te apetece descansar?”, Godai, tras salir con una chica, sugestionado por las palabras de Sakamoto y malinterpretando las acciones de la muchacha, piensa que tal vez debería ir a un love hotel con aquella chica. Este último capítulo debo decir no tan congruente con el desarrollo del personaje y más enfocado en las situaciones cómicas que presenta.  

De los capítulos que el anime adapta se encuentra “La escena del beso”, aunque sólo toma la situación inicial modificando el resto de la historia. Mientras en el manga se centra en la tensión sexual que surge entre ambos protagonistas después de ser besados por una Akemi borracha, pues tras el hecho tanto Kyoko como Godai se encuentran sugestionados, al ver en todos lados señales o posibilidades de besarse. En el anime se centra más en la ruptura amorosa de Akemi (razón por la que se emborrachó) y cómo afronta el problema. Aunque el asunto suena inocente al sólo centrarse en un beso, el ambiente del capítulo en general sí representa una tensión sexual entre ambos personajes, más allá de sus sentimientos o pensamientos, se enfoca en el deseo por los labios del otro.  

Los casos más significativos son justo al final, donde se omite toda una problemática que tiene que ver directamente con la sexualidad, pese a que los capítulos son adaptados. En el manga después de la última declaración de Godai ambos entran a un hotel, sin embargo una mención a Soichiro hace que Godai no pueda hacer nada esa noche, es incapaz de concentrarse pensando en él. Poco después los personajes hablan de lo ocurrido y aclaran sus sentimientos, entonces en verdad tienen una noche apasionada. Este hecho es importante porque en el anime no hay un momento en que ambos personajes hablen de sus inseguridades y con ello resuelvan sus problemas, siempre terminan haciendo escándalos, en cambio en esta ocasión ambos protagonista dialogan de temas que les son incómodos y que les impiden convivir. Hecho que permite apreciar la madurez que ambos adquirieron para el momento, además justifica que después de tanto tiempo ya puedan ser una pareja. Por otra parte el que sean tratados este tipo de temas un tanto tabú da una madurez a la obra, que el anime sólo bosteza, y aunque sí sugiere que existe una relación tan íntima entre Kyoko y Godai, omite los conflictos que esta misma conlleva.


El temor al compromiso de Kyoko



Este es un tema que sí puede verse en el anime, pero justo en los capítulos donde más se trata el problema son omitidos por el anime, además que esta adaptación muchas veces da la impresión que la protagonista acepta la relación de Godai y Kozue, hecho que borra el interés que tiene Kyoko por su inquilino. Kyoko teme que al amar a otra persona olvidé a Soichiro, esta es la razón principal de porque la protagonista no corresponde a Godai. Sin embargo debe considerarse que este argumento lo da la misma viuda, quien para estos casos es un narrador desconfiable. El comportamiento de Kyoko resulta raro, no corresponde a Godai, pero siempre muestra celos y enojos como si en verdad fuera su pareja. Esto se debe a que, más allá de temer al olvido de su difunto esposo, Kyoko teme iniciar otra relación. Le aterra querer a alguien porque con ello existe la posibilidad de perderlo. Y esto se justifica en las palabras de la protagonista cuando recibe la propuesta de matrimonio, le pide que al menos viva un día más que ella, pues no quiere sentir el dolor de perder a su ser más querido otra vez.  

En el manga el conflicto del miedo al compromiso llega a su clímax con el arco del hospital, sin embargo el contexto es cambiado en la adaptación. La diferencia principal es que en el manga Godai desea terminar su relación con Kozue, sin embargo no lo logra cuando ella le da un regalo de navidad. Al llegar a casa un tanto irritado discute con Kyoko y le cuestiona sus celos y lo que significa él para ella, pues a pesar de no ser pareja siempre está celosa y enojada con él. La situación termina con un accidente debido al mal estado del edificio, Godai salva a Kyoko de una caída, pero a cambio él sí cae. Durante la estancia en el hospital, Kyoko se cuestiona sobre su actitud, e intenta definir sus sentimientos por Godai. En el anime, los protagonistas no discuten, sino que se trata más de un malentendido, Godai está deprimido por no cortar con Kozue y cuando Kyoko intenta animarlo, el protagonista oculta el motivo de su pesadumbre, además le dice que ella es sólo la encargada y no debería meterse en sus problemas. Aunque sí hay una reflexión de Kyoko sobre sus celos, no es tan importante como la del manga, y, sin el contexto, se difumina el problema de fondo, que Kyoko, a pesar de querer a Godai, no puede iniciar una relación con él. 

Con esto también se ven dos cambios respecto al anime. En primer lugar, es más claro cuándo le comienza a gustar Godai a Kyoko.  En segundo el manga es más preciso a la hora de mostrar las crisis y cuestionamientos que los personajes tienen ante sí mismos. No es que el anime no lo muestre, pero sí omite puntos importantes en su desarrollo, lo que ocasiona un entendimiento más ambiguo de estos. 


Nozomu y los personajes omitidos



Hay diversos personajes que no aparecen en el anime, la mayoría no son casos relevantes a mencionar, pues tienen apariciones mínimas que llegan a abarcar tan sólo un número, entre ellos se pueden mencionar a la prima y a la hermana de Godai. El personaje más importante en este caso es Nozumu, quien no sólo es un personaje constante, incluso protagonizó varios números del manga. 

La madre de Nozomu le consigue un apartamento a su hijo para que estudie la universidad, sin embargo, en lugar de rentar los prestigiosos edificios Rikkoku, lo hace en la Maison Ikkoku. Gracias a la calurosa bienvenida que le dan todos los inquilinos, él decide quedarse, sin embargo pronto sus vecinos mostrarán su verdadera naturaleza y le jugarán broma tras broma. A pesar de la personalidad amable y madura, el chico decide quedarse a vivir en el Ikkoku hasta vengarse de sus nuevos vecinos. 

Se puede decir que Nozomu tiene dos lapsos relevantes en la historia, el primero que abarca su bienvenida al Ikkoku y sus intentos de venganza, y el segundo donde conoce a Kozue, lo cual desemboca en una serie de malentendidos que termina fortaleciendo la relación entre Kozue y Godai, a pesar que el protagonista deseaba lo contrario. El anime adapta algunos episodios donde aparece Nozumu, pero siempre es sustituido, por ejemplo cuando Mitaka investiga a Yotsuya, en realidad en el manga lo hace Nozomu; también es quién le aclara el malentendido a Kozue cuando vio a Godai y Akemi salir de un hotel, y no Yotsuya como ocurre en el anime. Este último hecho incluso tiene más sentido en el manga, porque Nozumu era amigo de Kozue. Y por supuesto aparece en la película, aunque es extraño que su primera participación en la obra animada, justo sea una película que no adapta al manga. 

En parte se entiende por qué el personaje no fue incluído en la adaptación, pues los arcos que protagoniza no son tan relevantes cuando se habla de la historia de forma global. Además otros personajes secundarios que llegaron a protagonizar sus propios arcos tuvieron funciones más relevantes, la abuela de Godai por ejemplo ocasionó un entendimiento mayor de Godai y permitió un desarrollo en la relación de Godai y Kyoko. Asuna y Yagami ocasionaron conflictos más relevantes, además la primera permitió un desarrollo mayor en Mitaka y la segunda un exploración más cercana a la psicología y pasado de Kyoko. Nozumu por desgracia se quedó a medias, da lugar a momentos divertidos, pero se queda atrás a la hora de desembocar en situaciones que desarrollen a los personajes. Incluso me parece que refuerza el statu quo de la obra, al unir más a Kozue y Godai. En el mismo manga conforme avanza la historia pierde importancia, pues hasta su participación en las fiestas de los vecinos es ocasional. No es un mal personaje, es carismático y su inocencia provoca muchas situaciones divertidas, sin embargo nada más allá de eso. 


Personajes secundarios



Por otra parte se cambiaron algunos eventos relacionados con personajes secundarios, que no pesan mucho en la trama, pero que sí trastornan la imagen que se tiene de ellos, pues muchas veces al buscar un efecto cómico la adaptación difumina su nobleza. El caso más representativo recae en Sakamoto, en anime después de una noche de copas termina endeudado en un cabaret, cómo no puede faltar al trabajo, le pide a Godai que lo sustituya en el cabaret por él para pagar la deuda; en el manga esto no ocurre, simplemente Sakamoto le consigue este trabajo cuando Godai es despedido del jardín de niños, básicamente en la original resuelve un problema mientras en la adaptación lo ocasiona. Otro caso es Kuroki, la jefa del club de las marionetas, ella le consigue el empleo en la guardería y posteriormente se encarga de que lo vuelvan a contratar. En el anime ni siquiera trabaja en la guardería y quien le consigue el empleo es Kozue. En la película vuelve aparecer, evento que tiene más sentido si se mira desde el manga, pues es compañera de trabajo y amiga de Godai, en el anime su participación se limita al festival estudiantil. 

Otro caso son los vecinos, en el anime queda en elipsis el momento en que se enteran que Godai y Kyoko son pareja, en el manga sí se ve esto y es incluso un momento tierno porque se alegran de sus amigos, además que deciden darles tiempo para que ellos convivan a solas, sin molestarlos con sus fiestas y burlas. Esto a su vez cierra cierto conflicto en la obra, pues durante toda la historia se puede ver cómo Godai y Kyoko no podían avanzar en su relación por las interrupciones o incluso el miedo a estos, el cual desaparece cuando Akemi, Yotsuya e Ichinose deciden apoyarlos. 

No obstante debo mencionar que la adaptación acierta en este tipo de cambios algunas veces. Por ejemplo cuando Yagami y Kozue se conocen, en el manga lo hacen casi de inmediato, pero conviven muy poco y no se aprovecha la situación. En el anime se conocen hasta el capítulo de baseball, y es más divertido ver cómo ambas se hacen amigas y meten en problemas a Godai, sin siquiera sospechar que las dos están interesadas en él. Otro caso es Mitaka que parece más cercano a toda la Maison Ikkoku, ya que el anime lo incluye en diversas ocasiones donde él en realidad no participa, como en la fiesta de disfraces o en la investigación a Yotsuya. Estas participaciones a la vez refuerzan la rivalidad amistad entre Godai y él. O incluso se mejora al mismo Soichiro, cobra más profundidad con el par de episodios navideños que son inexistentes en el manga. 


Ahora me gustaría comentar un par de elementos que sí aparecen en el anime, sin embargo los pasé por alto en su momento. 


La identidad de Soichiro



Tanto en el anime y manga el rostro de Soichiro se presenta como un misterio. En muchas ocasiones Godai intenta ver fotos de él sin éxito y sólo lo logra en vísperas de su boda. El hecho de que no se muestre el rostro de Soichiro tiene importancia dentro de la obra, pues representa diversos conflictos para sus protagonistas. Por lo común sólo puede conocerse al personaje por dos vías, por los recuerdos de Kyoko y por las comparaciones que hace ella (y otros personajes) entre él y Godai, sin embargo, aunque se resalta la similitud entre ambos, casi siempre se acompaña con una mención a que en realidad son diferentes. De hecho el interés de Kyoko por el protagonista nace en las ocasiones que su inquilino le recuerda a su difunto esposo. Con lo ya mencionado se puede asumir que toda la información que se da de Soichiro viene muchas veces de fuentes secundarias, jamás Soichiro habla por sí mismo, además todo lo que se conoce de él es por medio de menciones escuetas. Bajo este sentido se revela la visión que tiene Kyoko de su difunto esposo, como parte de un gran álbum de recuerdos hermosos, pero difusos, Soichiro es un fantasma cuya identidad se conserva en memorias que no son capaces de captarlo por completo. Entonces el que no se muestre el rostro de Soichiro refleja la imposibilidad de acercarse a un ser querido cuando este ya se ha ido, pues siempre algo se pierde en los recuerdos. 

También hay un sentido a esto si se ve desde la perspectiva de Godai. Él desea mirar el rostro de Soichiro para al menos tener una pista de qué clase de persona era. Godai intenta conocer a Soichiro para así saber cómo puede acercarse a Kyoko. Aunque hacerlo de esta forma sería igual a que Kyoko lo quisiera por su parecido a su exesposo. Godai no debe enamorar a Kyoko como un nuevo Soichiro, sino como él mismo. Por tanto ni siquiera puede ver su rostro, pues incluso conocer eso podría condicionar la relación de ambos. Así se entiende por qué Soichiro no tiene un rostro, porque ya sólo es un recuerdo para Kyoko y porque es un misterio que no debe ser revelado para Godai. Es significativo que el protagonista sólo pueda ver el rostro cuando está por casarse, ya que conocer a Soichiro no es algo pueda utilizar, el personaje maduró para ese punto. 


La suerte de Godai



La mala suerte de Godai es visible en el anime, sin embargo pierde parte de su importancia al no representar la crisis por el desempleo del personaje. Godai tiene una pésima suerte, en gran parte de las ocasiones cuando las cosas parecen ir a su favor todo termina peor de lo que él esperaba, incluso en casos inverosímiles. Se puede decir que Godai es alguien al que no se le da nada bien y siempre debe esperar el fracaso, pero antes que esto signifique una desgracia, es a la par lo que motiva todas las virtudes del personaje, pues sólo tras su esfuerzo y no rendirse es que logra conseguir sus objetivos. 



Existen muchos más cambios en la adaptación, sin embargo estos son los que considero más importantes. Por ejemplo, hay múltiples cambios en la cronología de los hechos, pero la mayoría se tratan de episodios que no influyen en la trama general, sino que pertenecen más al formato conocido como “la aventura del día”. Se puede concluir que el manga es una obra más cruda, pues representa temas complejos como la depresión, la sexualidad, el duelo y la pérdida y cómo estos afectan en relaciones posteriores. El anime sólo recupera estas temáticas de manera superficial, casi siempre con un propósito cómico. También debe resaltarse la inexistencia de Nozomu en la adaptación, más allá de su relevancia en la trama, una adaptación que se considere fiel no debería borrar este tipo de componentes de la narración. En este caso la eliminación de Nozomu y la poca relevancia de Kuroki, promueve la participación de otros secundarios más constantes, aunque también elimina matices que tienen más sentido en el manga. Se puede decir que la adaptación es una versión rebajada de Maison Ikkoku, captura el sabor original, pero a comparación resulta insípida. Sólo queda esperar que así como Urusei Yatsura tuvo su regreso, Maison Ikkoku lo pueda tener en algún momento. 



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