Alicia en el país de las maravillas es una novela trascendental para entender buena parte del género fantástico, marcó muchas de las formas en las que novelas posteriores habrían de basarse. Un adolescente común ingresa a un mundo fantástico. El mundo, además de albergar una serie de aventuras para el protagonista, también lo hace sufrir transformaciones que le obligan a preguntarse quién es. Cuando el mundo parece idóneo para el advenedizo, este se torna siniestro, peligroso y hasta dañino, el único escape y el encuentro de la identidad, se encontrará en el deseo de regresar a casa. Tras el retorno, el protagonista ya no es el niño de antes, ha aprendido algo, ha abandonado el mundo infantil y puede incorporarse de mejor forma a su mundo. Esta estructura se puede encontrar en el Hobbit, La historia interminable, Harry Potter, Las crónicas de Narnia, Charlie y la Fábrica de chocolates y muchas otras más. En esta tradición de viajes fantásticos y formativos se incrusta El regre...
"¡Sí, no soy más que un vagabundo, un peregrino en la tierra! ¿Eres tú algo más?"